DELINCUENCIA PRÓXIMA

Vivimos en un país con un alto , altísimo índice de delincuencia. Aquello que pretenden vendernos como "Estado de Derecho" en donde la ley impera y nadie está por encima de la norma; no es nada más que una gran mentira. En las Españas hoy día resulta más sencillo y fácil delinquir que vivir y actuar acorde a las leyes, unas leyes que perjudican a los más sencillos y que enaltecen protegen y ampara los desmanes de los más poderosos; especialmente a la casta de politicastros de diverso color pero venidos de la misma matriz.

En un país en el cual, además, la sociedad está aborregada y obnubilada por los chismes, las revistas del corazón (?), la telebasura y sobrevivir como sea el día a día; pero sin afán de mejorar el entorno en el que viven y que en un futuro heredarán sus hijos. Si queda algo para heredar.

Tal día como hoy diez años atrás, asesinaban en Sevilla al matrimonio Martínez Becerril; Alberto y Ascen con dos disparos en la nuca, a sangre fría, a traición y prácticamente a la puerta de su domicilio. Dejaban en el suelo de la fría noche su sangre y en el piso de arriba a dos hijos de corta edad. En España somos muy dados a reaccionar "en caliente" pero después ..... nos volvemos de un tibio que causa espanto. Desde este Blog mandamos un fuerte abrazo a la familia de los asesinados, nuestro cariño y oraciones por los que quedaron aquí y por el matrimonio que se fue hacia el Cielo.

Hace unos meses, en un congreso para profesionales de la seguridad, un alto responsable norteamericano muy conocedor de la situación española nos relataba lo siguiente:

"Ustedes se han amoldado hasta la tolerancia hacia el terrorismo de ETA. Es algo tan habitual en sus vidas que tras un atentado, reniegan, se quejan; pero tras el funeral todo queda diluido en las brumas del olvido. Han perdido la capacidad de reacción". Y añadía más adelante: "Ustedes ven el terrorismo como algo lejano porque no les ha tocado, si tienen la desgracia que les suceda un atentado; si viven la triste situación de pasar de espectadores a víctimas podrá ver como el terrorismo les es demasiado cercano y empezarán a preocuparse. Será tarde para ustedes, sobre todo cuando todos se alejen de ustedes después del funeral".

Mi querido amigo John, un honradísimo mormón residente en Phoenix (AZ) y una de las personas que profesionalmente más admiro; intentaba explicar las diferencias entre la delincuencia próxima y la distante. Dándonos a entender, que aunque el terrorismo es una de las mayores lacras de la sociedad; al ciudadano no afectado directamente lo que realmente le importa, le preocupa y le causa inseguridad es el delincuente de barrio, el carterista, el asaltador de casas, etc.

En España estamos asistiendo desde hace unos años a la llegada, implantación, primeras fases de desarrollo y permisividad hacia una delincuencia que en pocos años nos será terriblemente próxima: Las bandas organizadas de origen extranjero.

Como no existe estado de derecho, como tenemos un código penal asqueroso y como tenemos a nuestras policías y al poder judicial atados de pies y manos..... así nos va.

Esto no es un alegato contra la inmigración, sino una exposición sobre las causas que provocan el nacimiento de diversas asociaciones que acabaran resultando organizaciones delictivas, frente a la cual la justicia no actúa y no contentos con esta inacción; es necesario agregar que estamentos del Estado como es la Generalitat de Catalunya, les da cobertura legal al tratar como asociaciones culturales a organizaciones como los Latin Kings o los Ñetas. Repito, grupos delictivos que en los USA están considerados como MUY PELIGROSOS, los incompetentes politicastros que gobiernan Catalunya les dan apoyo ¡Claro, como somos tan multiculturales! Estos tíos se piensan que aquí no va a pasar nada, pero..... que Dios nos coja confesados.

Debido al eco obtenido en la prensa por grupos como los Latin Kings, por la pronta implantación que han tenido en España; acompañada por un amplio currículum delictivo que les "avala" por casi todos los países sudamericanos y los EE. UU.; estos son los más conocidos, pero no los únicos.

Vamos a la raíz del asunto.

La situación se inicia cuando jóvenes de procedencia foránea llegan a un país, que a pesar de compartir un idioma común (con sus diferentes matices), tiene pocas similitudes más con su modo de vida habitual. Es doloroso, muy doloroso, dejar atrás familia, vida, amigos, costumbres para llegar a un nuevo país del que casi nada sabes. No solo la partida ha sido dura, sino todo lo que ha sido necesario trabajar y esforzarse para conseguir pagar un billete de avión y a las mafias que organizan las llegadas masivas de extranjeros no regularizados a nuestros aeropuertos.

Las personas que llegan con la necesidad de trabajar para mantenerse y mantener a su familia, dispone más bien de poco o ningún tiempo para dedicarse a otra cosa que no sea ganar dinero para enviarlo a los que quedaron al otro lado del charco, pero el problema nos lo encontramos en los hijos adolescentes de estos inmigrantes, dentro del propio colegio; y de aquellos jóvenes que sin encontrar trabajo necesitan: un núcleo social próximo y afín en el que se sientan seguros; un apoyo constante, un sentimiento de camaradería y un modo de vida entorno a un líder. Al compactarse, solidificarse y formar una "familia" en este núcleo es cuando se dispara el instinto básico de supervivencia que no es otro que defender su tribu, su forma de vida, su estatus, sus costumbres, etc.

Por supuesto que toda organización necesita un medio económico para subsistir. Es a partir de estas células básicas formadas en los núcleos sociales de la calle; apoyados y subvencionados en principio por la matriz norteamericana, empieza a buscar los medios para financiarse. Al principio los delitos son menores y consisten en un chantaje muy discreto que realizan sobre los niños de últimos cursos de primaria y los de secundaria dentro de los mismos centros. A partir de ahí alargan sus operaciones a la calle cobrando peajes para pasar por zonas, utilización de instalaciones públicas (campos de fútbol, canchas de baloncesto, parques, etc.), lo que lleva a las primeras denuncias de padres y vecinos y a los primeros encontronazos con la Policía y la Justicia; y tal vez la posible visita a un centro de menores. No cabe decir que en España los centros de menores son clubes de vacaciones, pero en los que conocen y contactan, o se enfrentan, con otros delincuentes.

La siguiente fase en el desarrollo de este tipo de grupos es la delimitación y conservación del terreno ganado. Empiezan a imponer sus normas particulares en diversos barrios, normalmente marginales, cosa que molesta a otros grupos residentes en la misma zona o aledaños. A partir de este momento empiezan los enfrentamientos físicos, las peleas, las broncas y los destrozos por los que ninguno de estos niñatos va a pagar nada; se los llevan unos meses a un centro de menores y si se escapan..... NO PASA NADA. La "lógica" progresión de la banda ya consolidada es conseguir más dinero para pagar sus gastos de estructura, evidentemente el líder y su novia o novias deben vivir a cuerpo de rey sin trabajar. En este instante es cuando las bandas juveniles entran en la espiral de la delincuencia mayor: tráfico y venta de drogas, robos en los que obtengan más rentabilidad, secuestro express, etc. En el caso concreto de la venta de drogas es cuando empiezan a tener los primeros muertos al intentar quedarse con parcelas y zonas de venta en las que ya actúan otras organizaciones criminales y eso dispara las primeras guerras.

Efectivamente, el planteamiento parece el de una empresa que necesita hacerse con una cuota de mercado concreta y a partir de ahí expandirse, pero esa es la realidad y el planteamiento real, frío, pero veraz.

Uno de los agravantes con los que YA HOY no encontramos en las grandes ciudades, en esta temática; es la diversidad étnica, cultural y religiosa. La atomización de razas, creencias y nacionalidades va a convertir nuestros pueblos en una ensalada muy difícil de aliñar y aún más complicada de digerir; porque los politicastros no tienen el valor suficiente para hacer frente a estos problemas y poner mano dura y tolerancia cero a estos problemas. El eslogan de la Dirección General de Tráfico dice: "No podemos conducir por ti": CLARO, sinvergüenzas, estáis contando el dinero que nos robáis a base de multas con la excusa del tráfico ¿Por qué no actúan igual con la delincuencia? En primer lugar porque la sociedad está abotargada y no reacciona y en segundo lugar porque no les causa beneficio económico.

Pero realmente tenemos un importantísimo problema que se irá agravando con los meses y los años. Porque además de que a los delincuentes aquí no les ocurre nada; la cultura de la inmensa mayoría de la inmigración es violenta, de imposición de las ideas por la fuerza o por la presión social del "que dirán".

La violencia en Perú es brutal, un país en el que el grupo terrorista Sendero Luminoso decapitaba a sus víctimas por el mero hecho de no que no entendían los postulados comunistas y solo querían trabajar para alimentar a sus familias. Las cabezas decapitadas de cientos de campesinos eran tiradas al río para que fueran vistas en todas las poblaciones por las que pasaba el curso de agua.

En Colombia solo tenemos que mirar a como actuaban los cárteles de la droga de Cali y Medellín; como lo hacen hoy día los paramilitares y los grupos terroristas comunistas de las FARC y ELN.

No tenemos más que asomarnos a las televisiones de España, todas en manos de los progres para ver como miran con simpatía a Hugo Chávez Frías a la vez que "informan" de como los seguidores del "comandante" asesinan a los manifestantes de la oposición, sin que ocurra nada y sin que a nadie se le mueva un músculo de la cara ni se les caiga la cara de vergüenza.

Tenemos inmigración africana que ha huido de masacres tribales, no solo por supervivencia, sino porque han sido parte en esa lucha. No hace muchos días un amigo policía me mostraba las fotos incautadas a un sujeto detenido, en las cuales podía verse al individuo rodeado de cabezas cortadas a sus pies y otra que sostenía en su mano izquierda, mientras la derecha blandía un machete de grandes dimensiones.

Esta es la situación y esta es la exposición de motivos basada en hechos reales, en situaciones que se viven a diario y en la inactividad de unos gobiernos incapaces de poner solución. Como decía mi buen y querido amigo John en su claro y culto español con acento de Arizona:

"Creo que por desgracia, la sociedad española reaccionará contra lo que os viene encima cuando ciudades enteras sufran en sus carnes la violencia de las bandas organizadas, lamentablemente será tarde y lamentablemente se llevarán a cabo acciones cuando el afectado sea hijo o nieto de un político, porque esta será un violencia no tan solo próxima; sino inevitablemente cercana".