viernes, 19 de mayo de 2017

CORRUPCIÓN: UNA, GRANDE E IMPUNE

Recuerdo mi primera de criminología cuando tras la larga presentación, el catedrático nos dice rotundo: "La base de absolutamente todos los delitos, es la codicia". Con el tiempo y la formación recibida, eso es inapelable.

La codicia, entendida como acumulación constante e irrefrenable de obtener dinero de manera ilícita mediante el robo continuado al erario público, es la cuestión que nos centra en este momento. Lord Acton acuñó la frase: "El poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente", no podía estar más acertado el británico. Eso nos ha ocurrido en España, hemos generado una corrupción desmesurada que se inició en lo político y ha continuado en lo económico.

Entiendo que tras la muerte del general Franco resultó necesario hacer una serie de movimientos y enjuagues políticos destinados a la liquidación de la dictadura, con la intervención directa de los Estados Unidos, y la complicidad del anterior jefe del estado, Juan Carlos de Borbón; para poner cierto orden en el régimen que venía despuntando o que iban a imponernos bajo una capa de democracia liberal. Por un lado el menguado "bunker" franquista que pasaría con armas y bagajes a las filas de los diferentes partidos políticos; salvo honrosas excepciones como pudieron ser Girón de Velasco, Utrera Molina o el bueno de Blas Piñar, poco más permaneció fiel a los ideales del Movimiento. El "coco" de la nueva situación política iba a ser el único partido fuerte de oposición a Franco, el PCE al mando del genocida Santiago Carrillo Solares y la nefasta Dolores Ibárruri. El PSOE no era ni sombra de lo que llegó a ser en tiempos de la segunda república y tal vez aquí se diera el primer gran caso de corrupción con el dinero enviado desde los Estados Unidos, a través de Olof Palme y Willy Brandt, para revitalizar el partido y bloquear la llegada de los comunistas al poder. Con los secesionistas catalanes y vascos no había vuelta de hoja, la única manera de mantenerlos dentro del redil y relativamente calmados, era darles dinero a manos llenas y mirar hacia otro lado. Este resultó el punto de partida, el banderín de enganche al que todos los vividores de los impuestos que pagamos los españoles, se sumaron para mantener sus partidos políticos, sus estructuras, su nivel de vida y una garantía para su bienestar personal futuro.

Recuerdo un convulso y complicado congreso de jóvenes pro vida en Barcelona, tras finalizar las charlas nos fuimos a pasear con amigos de fuera por Las Ramblas y el barrio gótico. Esa noche había aparcados en la plaza de Sant Jaume un gran número de coches con múltiples acólitos de Convergència i Unió que "espontáneamente" y tras recibir la orden de alguien que salió del palacio de la Generalitat, recorrieron las calles de Barcelona lanzando pasquines y al grito de ¡¡¡PUJOL i CATALUNYA!!! Acaba de "solucionarse" judicialmente el fraude en Banca Catalana y el "amado líder" quedó libre de toda culpa. Recuerdo que le dije a un amigo carlista: "Esto es el principio del conflicto supuestamente político contra España". Él se limitó a negarlo moviendo la cabeza, e imagino que ya tenia entre sus planes, acabar implicado en las filas de Unió Democràtica de Catalunya. ¡¡¡Qué cosas tiene la vida!!!

Por motivos de mi profesión, siempre me he movido cerca de quienes han manejado los hilos del poder de una u otra forma. Les adelanto que mi hipoteca la pagué trabajando sin horario de finalización y que perdí parte de la infancia de mi hijo para que no faltara de nada en casa, soy un currante y solo he recibido ingresos de mi nómina. Pero la realidad es que estuve muchos años cerca de los círculos de decisión políticos y económicos.

A mediados de los años 90 del siglo XX, resultaba "normal" escuchar como a la esposa del conseller Macià Alavedra, la "pintora" Doris Malfeito, le compraban sus cuadros en todas las consejerías y ayuntamientos importantes gobernados por Convergència a precios realmente escandalosos. Y todos tan contentos porque todo quedaba en casa. Como "normal" era que la empresa de jardinería propiedad de Marta Ferrusola, ganaba todos los concursos de empresas públicas y privadas para el mantenimiento de parques, jardines y complementos; estando sus precios por encima de lo licitado. Marta Ferrusola acostumbraba a contratar a personas con discapacidades físicas e intelectuales, para obtener subvenciones notables, lo que conllevaba a que para cierto tipo de trabajos más especializados, utilizaba personal extra y lo repercutía en la factura del cliente. ¿Se puede ser más rastrero alardeando de dar trabajo a personas discapacitadas, pero con la base real de obtener dinero a su costa y enriquecerse con trampas solo por ser esposa del presidente de la Generalitat? No podíamos esperar nada bueno de la Ferrusola, individua que por otro lado también organizaba las relaciones públicas de Jordi Pujol y hacía de puente para facilitar entrevistas entre su marido y quien quisiera verlo en privado.

En la Barcelona de los 80 tardíos también aterrizó un enviado por el gobierno español que tenía como misión liquidar la charlotada terrorista llamada Terra Lliure, ni piensen ustedes por un momento que fue cosa de los políticos, ellos solamente se llevaron el mérito y por supuesto, el dinero. Este agente del CESID organiza su propia infraestructura de inteligencia y acaba trabajando para uno de los mayores y más desconocidos conspiradores de las últimas décadas, el conde de Godó. Son los años de las corruptelas con los medios de prensa, y con todo lo que fuera posible. Los años de continuos vaivenes económicos con Mario Conde, Javier de la Rosa y Manuel de Prado; íntimo amigo de Juan Carlos de Borbón. Hay por mi biblioteca un libro muy interesantes, en formato de novela, sobre estos años escrito por Fernando Rueda y en el que se detallan muchos hechos. El conde de Godó recababa información de todo y de todos, sin saber que ese agente del CESID llamado Mikel Lejarza Eguía, nunca había dejado de trabajar para "La Casa" y que toda su organización no era más que una pantalla.

En los 80/90, Mikel Lejarza ya había descubierto la fortuna oculta de la familia Pujol Ferrusola en Suiza y Andorra, informando al gobierno de Felipe González que se limitó a dar el "enterado" por respuesta sin hacer absolutamente nada. Las fiestas y alardes públicos de los hijos de Jordi Pujol, la ostentación y el lujo también se pusieron en conocimiento de las autoridades de la Nación que miraron hacia otro lado. 

Más de lo mismo con Aznar. Hasta que punto estamos ciegos que los llamados "grandes partidos nacionales" son incapaces de entenderse para dar a la Nación un proyecto de viabilidad y estabilidad; porque siempre han primado sus egoístas objetivos de partido por encima del bien general de los españoles. González, Aznar, Zapatero y Rajoy se han lanzado a los brazos de los secesionistas con la billetera por delante, enriqueciendo a una clase política multimillonaria y quitando a la sociedad prestaciones hospitalarias, académicas o algo tan urgente y necesario como la erradicación de la pobreza.

El escándalo de los Pujol, supongo que ayudado por algunos resortes del estado, estalla públicamente o mejor dicho reaparece nuevamente con las conversaciones filtradas entre Victoria Álvarez (amante de Jordi Pujol Ferrusola) y Alicia Sánchez Camacho del PP (¿Alguien sabe donde está ahora esta señora?) A partir de ahí entran en juego diversas maquinarias para distraer la atención general, el absurdo "prusés" independentista, la comparecencia parlamentaria de Jordi Pujol hablando del "legado" de su padre, el "avi Florenci"... Todo tremendamente absurdo, todo encuadrado en una opereta funesta que se hunde por si sola. En mis años jóvenes de lucha callejera en Cataluña, los independentistas marxistas del MDT, IPC y demás chusma intentaban situarse bien lejos de la órbita de Convergéncia, pero "curiosamente" todos vivía o recibían subvenciones jugosas por parte de la Generalitat. En aquellos años se hizo popular una frase creada por estos lumbreras: "Que pagui Pujol!" (¡Que pague Pujol!). Oigan ustedes, nada más cierto que dicha afirmación. Las comparecencias de los Pujol Ferrusola en el Parlament ante la comisión que estudiaba su caso, estaba presidida por un tal David Fernández de las CUP; es decir: un secesionista socialista marxista leninista. En algunas conversaciones hubo quien aventuró una severa posición de la comisión contra la "famiglia Pujolone" y... Y nada más alejado de la realidad, la actitud de la comisión parlamentaria y de su presidente fue servil, rastrera y totalmente protectora hacia los Pujol Ferrusola y especialmente hacia doña Marta. La misma doña Marta que prohibía a sus hijos pequeños jugar en el parque con niños que hablaran en español, la misma doña Marta que siempre ha mantenido una actitud racista, supremacista y etnicista hacia todas aquellas personas que no procedieran de una "pura raza catalana". Y no me hagan aclarar este último punto, porque podría meterme en un problema judicial serio. No sé como Marta Ferrusola ha accedido a que su hijo Jordi tuviera una amante de apellido Álvarez o por qué ha consentido sentarse en el parlamento al lado de un independentista de apellido Fernández, cuyos padres o abuelos; seguramente, no hablaban ni pizca de catalán.

Tras el ingreso de Pujol hijo en prisión, se han filtrado a la prensa diversos documentos de esta "organización criminal organizada" como los define la UDEF, en los que la mujer recta, recatada, cristiana y modelo de mujer catalana... es decir, la Martona Ferrusola, utiliza una identidad eclesiástica para ordenar a su banquero el movimiento de dos millones de pesetas de una cuenta a otra. Estamos hablando de cuando aún existían las antiguas pesetas, a saber que habrá pasado con los movimientos desde entonces, hasta los actuales euros. Otra falsedad al descubierto, la pía Ferrusola, se nos presenta como una irreverente Marta cuyo único Dios es el dinero.





Las primeras declaraciones de Jordi Pujol sobre el supuesto legado de su padre, otra perla cuyo testaferro era el padre de Artur Mas, causaron una enorme fractura no solo en Convergència Democrática sino también socialmente en muchas familias, cosa de lo que fui testigo. La devoción al totem separatista llevó a un sobrino político mío, empresario, decir: "Yo soy convergente y como todos roban, prefiero que el dinero se lo queden aquí antes que en Madrid"; mientras su suegra, mi cuñada, demudaba su rostro de la palidez cadavérica al rojo indignación. Convergència, como máquina política y económica es capaz de maniobrar y sobrevivir a este caos momentáneo que la envuelve, ya están organizadas las diferentes opciones políticas bien sea para continuar con el fraudulento "prusés" o para retornar a la entente cordiale con el gobierno central. Todo está planeado, no pueden ni dejar de mandar, ni olvidar el mangoneo del que viven. Mangoneo, por otro lado, habitual en nuestra nefasta clase dirigente, la mayoría de los cuales no han doblado la espalda en toda su vida.



Hay quien en caricaturas gráficas que circulan por internet, han mezclado el famoso 3% a los Pujol, cosa que ha costado numerosos disgustos al mundo separatista y notables erosiones. Pero se equivocan y es necesario aclarar y separar "contablemente" estos dos conceptos. El 3 o 4% es el dinero robado en múltiples fraudes para el mantenimiento de CiU y sus cuadros de mando. El latrocinio colectivo de la "organización criminal" descrita por la UDEF, es para el enriquecimiento ilícito de la famiglia Pujol Ferrusola.




Enriquecimiento en el que hay ramificaciones con el banco de Santander por la compra de 1.152 oficinas de esta entidad financiera, con el quebrado grupo PRISA y vaya usted a saber con cuantos ladrones más.


Desgraciadamente no habrá en España una iniciativa legal para poner fin a toda esta podredumbre en la que se hallan envueltos desde Juan Carlos de Borbón con Corinna, su hija Cristina e Iñaki Urdangarín, pasando por Bárcenas, Cháves, Griñán, Ignacio González y ... 



Nos hemos acostumbrado a mamar impunemente de la teta del estado, es decir, del bolsillo de los españoles que a diario nos levantamos para con nuestro esfuerzo poder sacar adelante a nuestras familias. De quienes pasamos horas y horas fuera de casa para que nuestros hijos reciban una formación adecuada, tengan una asistencia médica digna y puedan hacer frente a los retos, mejor de como lo hicimos nosotros. Gran parte de nuestro esfuerzo es robado sin sonrojo alguno por toda esta panda de sinvergüenzas, con nuestro consentimiento, nuestro voto y un encogimiento de hombros, porque al fin y al cabo "si no me roba uno, me robará otro".



Lo he dicho en múltiples ocasiones, mientras no cumplamos las leyes, mientras no nos tomemos en serio el cumplimiento de las penas y mientras no dispongamos de un ordenamiento jurídico eficaz... jamás llegaremos a ser nada; porque no olvidemos que por más implicados que haya en las tramas defraudadoras, la corrupción solo es una, la que se hace del dinero público, de nuestro dinero.






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